El gobierno de los Estados Unidos ha metido en la lista negra de compañías poco fiables a Xiaomi alegando que tiene contactos con el ejército chino. Huawei ya sufrió en su momento este "castigo". Este movimiento parece ser el (esperemos) último movimiento contra China de la administración Trump. Además de Xiaomi, hay otras siete empresas chinas que han recibido este tratamiento.
La incógnita está en saber si el sucesor de Trump dará marcha atrás en estas medidas contra empresas chinas. Biden puede continuar, dar marcha atrás, o dejar las cosas como están. De momento no hay comunicados oficiales al respecto.
La cuestión tras estos bloqueos es si hay intereses empresariales detrás de estas medidas para proteger los intereses de empresas estadounidenses. El efecto colateral de estas medidas supuestamente tomadas por cuestiones de seguridad nacional es el de reducir las ventas de los dispositivos que comercializan compañías como Huawei en su momento, y Xiaomi ahora.
Según la administración Trump, Xiaomi ahora es una “Communist Chinese military company”. Ahora mismo, son Samsung y Apple las empresas que saturan el mercado de las telecomunicaciones móviles en EE,UU. Si Biden da marcha atrás, se abriría el mercado a otros fabricantes asiáticos.
