NJ Tech ha publicado una interesante comparativa en la que enfrenta a las RX 480 en su versión de 4 GB, GTX 1060 en su versión de 6 GB y GTX 1650 Super, tres tarjetas gráficas de gama media que se encuadran en generaciones diferentes, y que ofrecen un nivel de rendimiento que, todavía hoy, es suficiente para jugar bien en 1080p en la mayoría de los casos.
La Radeon RX 480 tiene 2.304 shaders, 144 TMUs, 32 ROPs, bus de 256 bits y 4 GB de GDDR5 a 7 GHz. Por su parte, la GTX 1060 tiene 1.280 shaders, 80 TMUs, 48 ROPs, bus de 192 bits y 6 GB de GDDR5 a 8 GHz. La GTX 1650 Super tiene 1.280 shaders, 80 TMUs, 32 ROPs, bus de 128 bits y 4 GB de GDDR6 a 12 GHz.
El tiempo pasa, y la RX 480 lo ha notado de forma considerable. Esta tarjeta gráfica fue en su momento una de las mejores soluciones de gama media por su valor precio-rendimiento. Todavía es capaz de rendir bastante bien en 1080p, pero la configuración de 4 GB de memoria gráfica, y su baja frecuencia de reloj frente a la RX 580, hacen que pierda de forma clara frente a la GTX 1060 de 6 GB que, junto con la GTX 1650 Super, son las más potentes de la comparativa.
Los resultados pueden variar mucho en función de cada juego en concreto, así que os recomiendo que veáis el vídeo al completo. Juegos como Red Dead Redemption 2, por ejemplo, funcionan bastante mal en la serie GTX 10 de NVIDIA, de hecho no se salva ni la GTX 1080 Ti, y esto permite a la RX 480 lucirse y ofrecer un rendimiento casi idéntico.
Será interesante ver cómo evolucionan estas tarjetas gráficas en rendimiento cuando se empiece a completar la transición a la nueva generación. De momento aguantan el tipo.