Intel y su tecnología de fabricación de 10 nm han sido un foco de polémica durante, al menos, el último año. Con un retraso notable y problemas de todo tipo, incluso los procesadores Rocket Lake-S seguirán estando fabricados con tecnología de 14 nm, lo cual impide, por ejemplo, que haya modelos de más de 8 cores en un momento en el que AMD ofrece 16 cores incluso.
Con todo, Intel ha compartido un vídeo (grabado antes de la pandemia, por lo que no aparecen mascarillas por ningún lado) en el que narra el proceso de refinamiento y optimización de la tecnología de fabricación de 10 nm con un énfasis especial en los "yields", que debe ser uno de los problemas más serios de Intel.
Un yield bajo implica que de cada oblea se pueden extraer un número reducido de procesadores, lo cual los encarece y reduce la disponibilidad. Intel habla de doblar la capacidad en los últimos tres años, lo cual no es que sea un logro absoluto apreciable a la vista de lo que ha hecho TSMC con el salto de los 7 nm a los 5 nm en un periodo de tiempo similar.
Intel fabrica chips de 10 nm en Oregón y Arizona en EE.UU., y en Israel. En cualquier caso, el vídeo permite ver cómo funciona una "fab" con bastante detalle.