Aunque son chipsets para dos plataformas totalmente distintas, algo las une: tanto las placas con chipset B550 para procesadores AMD AM4 como los chipsets de la serie 400 para los futuros procesadores de Intel Comet lake ya están listos y los ensambladores están en disposición de lanzar estos productos, por lo menos eso dice Biostar.
Seguimos sin saber cuándo será, esto no lo ha desvelado Vicky Wang, ejecutivo de Biostar, pero durante este final de año los ensambladores deberían recibir en suficientes cantidades los distintos chipsets que llegarán, pronto, al mercado. Todos los rumores apuntan a enero con el CES 2020 como escaparate.

El chipset B550 para los procesadores AMD con socket AM4 es la esperada solución económica para montar los procesadores AMD Ryzen utilizando las últimas tecnologías, así pues a diferencia del actual chipset X570 traerá soporte limitado para PCIe 4.0 pero lo estará. Las dudas aparecen cuando con el paso de los meses, el chipset X570 llegó en junio, éstos han provocado la salida de placas base X570 bastante más económicas que las iniciales y ahora hay dudas sobre cómo conseguirán hacerse un hueco esas futuras placas B550. Pero este es un problema de los ensambladores y de AMD.
Por otro lado se espera que la nueva generación de procesadores Intel bautizados como Comet Lake también lleguen a principios de 2020 y estos requieren sí o sí nuevos chipsets. Entonces llegarán los chipsets serie 400 de Intel. Según los rumores habrá tanto un chipset estrella bautizado como Z490, como soluciones recortadas y más económicas bautizadas como B460 y H410.
El mensaje que ha querido dar el ejecutivo de Biostar es que ellos ya están listos para el lanzamiento y que tienen sus productos preparados, así que está en manos de AMD e Intel dar el pistoletazo de salida presentando y dando la órden de comercializar las nuevas oleadas de placas base.