La compañía nipona Nidec, fabricante de los motores internos de corriente continua de los discos duros tradicionales con una cuota del 85% de los mismos, ha afirmado que para este 2019 tienen previsto suministrar la mitad de motores que los que suministraron en 2018.

Por lo tanto se deduce que se fabricarán la mitad de discos duros durante este año respecto al año anterior. Los motivos para esa drástica reducción son los que podíamos suponer antes de leer la noticia: la presencia de SSD en todos los segmentos del mercado y con precios muy competitivos y la tendencia al uso de sistemas de almacenamiento en la nube.
Nos comentan que en 2010 Nidec suministró 650 millones de motores para montar discos duros mecánicos y ya en 2018 esa cifra había bajado hasta los 375 millones mientras que para este 2019 las previsiones son de 290 millones.

Cierto es que los centros de datos siguen requiriendo discos duros de más de 10 TB y seguirán vendiendo discos duros tradicionales pero es el único mercado que aguanta la presión de los SSDs, así las prespectivas de futuro no son nada buenas ya que esa reducción del 50% pinta a ser acumulativa y en 2020 vender un menos de 200 millones de motores.