El overclocker Kovan Yang ha logrado subir un procesador Core i7 8700K hasta unos impresionantes 7,45 GHz de frecuencia, una cifra que viene a ser el doble de la velocidad de trabajo base que tienen estos procesadores (3,7 GHz).

La prueba ha mantenido activos los seis núcleos del procesador y también la tecnología HyperThreading del mismo, por lo que en total sumaba doce hilos. Es la primera vez que un procesador Core de Intel llega a una frecuencia tan alta con estas condiciones.
Para conseguirlo se ha utilizado nitrógeno líquido y se ha acompañado al Core i7 8700K de una placa base MSI Z370 Godlike Gaming, memoria DDR4 no especificada y una NVIDIA 8400 GS. El bus estaba configurado en 101 MHz y el multiplicador en 73x.
El overclocker der8auer consiguió llegar hasta los 7,3 GHz, así que estamos ante un auténtico récord que confirma lo bien que sube de frecuencia el Core i7 8700K de Intel.
A nivel doméstico la mayoría de medios que lo han probado dicen que con un kit de refrigeración de calidad por aire puede llegar a los 4,8 GHz de forma estable, y que con refrigeración líquida se podrían superar los 5 GHz, aunque todo depende de cada chip en concreto ya que el silicio nunca ofrece exactamente los mismos resultados.