Un portavoz de Intel ha explicado los motivos que han llevado al gigante de Santa Clara a hacer que los procesadores Coffee Lake S para escritorio no sean compatibles con las placas base que utilizan chipset serie 100 y serio 200
Según la compañía estos nuevos procesadores tienen más núcleos (seis como máximo en lugar de cuatro) y por ello ha sido necesario rediseñar el sistema de alimentación. Ese nuevo sistema de alimentación se ajusta totalmente a las necesidades de los nuevos procesadores Coffee Lake, y al no estar presente en las placas base con chipsets serie 100 y 200 habría problemas y por eso no es posible utilizarlos.
Intel también ha hablado del soporte de memorias DDR4 a 2.666 MHz como otra de las causas de la ausencia de soporte, pero no ha explicado por qué no es posible utilizar procesadores Kaby Lake S en placas base con chipset serie 300. Debería ser también por el tema de la alimentación, pero no han hecho comentarios en este sentido.
Con Coffee Lake Intel también ha confirmado que se han centrado en mejorar el rendimiento de los procesadores y que las GPUs integradas tienen la misma base y el mismo rendimiento por MHz que la generación actual utilizada en Kaby Lake, así que sólo se mejorará su rendimiento de forma limitada mediante un aumento de frecuencias de trabajo.
