Que id Software haya aceptado el reto de llevar DOOM a Nintendo Switch dice mucho de sus capacidades y de la escalabilidad de su motor gráfico, el id Tech 6, que también se utiliza en Wolfenstein II The New Colossus, otro juego que contará con una adaptación en la consola portátil de Nintendo.
Las primeras comparativas gráficas han confirmado que DOOM tiene una calidad gráfica muy reducida en Nintendo Switch, cosa que es normal por las limitaciones que tiene la consola de Nintendo, pero había dudas sobre el rendimiento que iba a ser capaz de ofrecer, sobre todo al trabajar en modo portátil.
Los medios que han podido probar esta versión han confirmado que el juego tiene una calidad gráfica bastante buena (el pequeño tamaño de la pantalla también ayuda), y que en modo portátil funciona a 30 fotogramas por segundo.
La versión para PS4 y Xbox One utiliza resolución dinámica para intentar mantener medias que oscilan entre los 50 y los 60 FPS en la primera y entre los 40 y 60 FPS en la segunda. Los resultados son mejores y más estables en PS4.
Para disfrutar de DOOM en toda su gloria es imprescindible mantener 60 FPS estables, pero en el caso de Nintendo se entiende que es imposible por sus limitaciones técnicas, de hecho ya es una sorpresa que hayan podido llevar el juego a dicha consola.