No siempre tenemos la oportunidad de analizar un... periférico... o un complemento tan peculiar como sobre el que nos sentamos hoy. Se trata de una silla gaming, de ésas que tan populares se han vuelto con la aparición de los eSports, y resulta ser, además, la primera que analizaremos en Noticias3D. La Corsair T1 Race es una silla de aspecto llamativo, eso sin duda, pero sobre todo es ergonómica, característica primordial que un producto como éste debe tener en cuenta sí o sí...

Podríamos resumir las principales características de la T1 Race a continuación: estructura de acero sólido con cojín de espuma densa, reposabrazos con ajuste horizontal y retráctil, asiento con altura ajustable, respaldo reclinable, inclinación con bloqueo y ruedas suaves de nylon. A nivel general, estamos ante una silla extremadamente cómoda, cuya ergonomía destaca por encima de todas las demás características, y que notamos nada más sentarnos en ella.

Como decíamos, los reposabrazos se pueden mover de atrás a delante, y también rotarlos en horizontal. La parte del asiento es muy cómoda, con forma de cuenco para que nuestras posaderas reposen mejor. Podremos ajustar la altura del asiento gracias a la palanca que encontraremos en parte inferior derecha, además de bloquear la función de inclinación tirando de la palanca o encajándola hacia adentro. Otro detalle importante es el cojín donde descansarán las lumbares, una especie de "mochila" frontal que podremos subir o bajar gracias a las gomas que lleva incorporadas, y que deberemos colocar en el puente de los lumbares. Lo hemos encontrado el mejor detalle de todos; y si nos molesta siempre podemos quitarlo sin problema.

Lo mismo pasa con el reposacabezas, un cojín más pequeño que se pone a la altura de la cabeza y que también podremos ajustar, o bien quitarlo si no nos convence. Otro aspecto en el que Corsair ha hecho hincapié con esta T1 Race es el desplazamiento de las ruedas: 5 patas y 5 ruedas para que el desplazamiento se pueda realizar en cualquier dirección incluso con nosotros sentados. Lo hemos probado: la suavidad en el cambio de dirección es impresionante, y si bien esta capacidad suele decrecer con el paso del tiempo, se trata de una de las sillas con mejor desplazamiento que hemos probado.

Además de poder escoger entre 5 colores distintos (negro, rojo, azul, blanco y amarillo), la T1 Race es llamativa en todos los aspectos. Tras probarla por bastante tiempo, hay que decir que se trata de una silla extremadamente cómoda, especialmente en el asiento y en la región lumbar. Los reposabrazos no están mal, es un detalle sus dos tipos de desplazamientos, pero los hay más cómodos (son algo rígidos), mientras que el reposacabezas es muy bueno también. La única pega que podemos encontrarla a la T1 Race es que al estar acabada en imitación de piel sintética, lo cierto es que puede dar algo de calor, ya que no es muy transpirable, pero en cualquier caso es cómoda, muy, muy cómoda.

La verdad es que como producto, la Corsair T1 Race rebosa calidad por todos lados, y eso se nota desde el mismo instante en el que te sientas en ella. Los 350 euros que cuesta lo valen.