El gigante del chip ha tenido que echar un poco el freno con la tecnología 3D XPoint, esa revolucionaria generación de memoria no volátil a medio camino entre la NAND Flash y la RAM que promete marcar un antes y un después.
Dicha memoria iba a estar destinada en principio a la plataforma profesional de Intel, donde encontramos los procesadores Xeon, y se dijo que debutaría en la primera mitad de 2017, pero al final este plan no se va a cumplir.
El propio CEO de Intel, Brian Krzanich, ha confirmado que serán los procesadores Cannonlake-EP los que soportarán memoria 3D XPoint, y éstos no llegarán hasta 2018.
