Fabricante: Sapphire
Placa base: Sapphire PC-A9RD580
Tarjetas gráficas: Sapphire Radeon X1600 PRO
Conexión: 2x PCI Express x16 en Crossfire
Procesador: AMD Athlon FX-60
Las configuraciones duales de tarjetas gráficas ya llevan entre nosotros más de un año. La alternativa de Nvidia se llama SLI y la de ATi Crossfire. No dejan de ser opciones algo elitistas ya que suelen ser bastante caras, por lo menos en la gama alta, básicamente se trata de doblar el número de tarjetas gráficas y dependiendo del caso tener que cambiar la placa base para que soporte dicha tecnología. Incluso en casos de equipos de alto rendimiento deberemos adquirir una fuente de alimentación muy potente para aguantar esta carga.
Las alternativas gráficas de gama baja y media soportan una configuración dual más light y algo más asequible tanto de requisitos como de complicación de instalación y montaje. Así que creemos que es el momento de dar un poco de repaso al funcionamiento práctico de un sistema Crossfire y tras solicitarlo, ATi nos ha proporcionado una placa y tarjetas gráficas de gama media ideales para la ocasión.

Vamos a probar un equipo de Sapphire con dos tarjetas X1600 Pro de 256MB, probaremos las diferencias de rendimiento entre tener o no tener activada dicha función y de paso esto resultará un análisis de una X1600 Pro, tarjeta que hasta la fecha no había pasado por nuestro taller.
De paso probaremos algún invento a ver si funciona el Crossfire con otros modelos de tarjetas y veremos si hay mucha flexibilidad o no. Así pues ¿Vale la pena comprar dos tarjetas para ganar rendimiento o es buscarnos problemas? Intentaremos ver si hay una ganancia importante de rendimiento como para justificar la inversión.

Presentación del conjunto