Si atendemos a los componentes internos del ASUS ProArt P16, tenemos que ponerlos en el contexto del sistema de refrigeración presente en el equipo. Se trata de un portátil de 1,83 cm de grosor en su punto máximo, con un peso de 1,95 Kg, cifras excepcionalmente comedidas si tenemos en cuenta que el procesador es un AMD Ryzen AI 9 HX 370 con 12 cores y 24 hilos Zen5, más una GPU dedicada NVIDIA GeForce RTX 5080 Laptop con un TGP de 115W.

Las especificaciones hablan de nada menos que 135W de disipación conjunta de CPU y GPU, sostenidos, además. Imagina tener una bombilla de 135W encendida dentro de una carcasa tan delgada como esta: es un logro tecnológico excepcional.
La elección de un procesador AMD Ryzen AI 9 HX 370 en vez de un Intel Core Ultra Lunar Lake, por ejemplo, tiene sus pros y sus contras. Por ejemplo, los 64 GB de RAM integrados, con un Lunar Lake serían imposibles de conseguir. Y para un diseño tan fino como este, es conveniente contar con un TDP comedido como los 28W del AMD Ryzen. Lo que no tenemos, a cambio, es Thunderbolt 5, aunque sí USB4.
Por otro lado, tenemos una estupenda gráfica NVIDIA GeForce RTX 5080 Laptop, con 16 GB de memoria VRAM y un TGP máximo de 115W. Están lejos de los 150W de TGP que alcanzan las RTX 5080 Laptop en equipos gaming. De todos modos, esta GPU ha sido elegida para acelerar la ejecución de tareas de productividad como la edición y el renderizado de vídeo o la aceleración de cargas de IA. Por supuesto, es posible jugar con este portátil, pero los gamers tienen mejores opciones por el precio que se paga aquí en equipos específicos para gaming en los que se sacrifica especialmente el apartado de la portabilidad.

La cantidad de memoria RAM instalada es de 64 GB. Suficientes para todo lo que se pueda precisar en cuestión de rendimiento, con la salvedad de la instalación en local de modelos de IA generativa como el de código abierto de OpenAI con 120 billones de parámetros.
La unidad de almacenamiento SSD es de 2 TB con tecnología PCIe Gen4 x4, que también es una cifra más que suficiente para escenarios de productividad. Hay una segunda ranura M.2 disponible, aunque en este caso con tecnología PCIe Gen4 x2, lo cual limita la velocidad de transferencia. Aunque para almacenamiento sin exigencias de velocidad de acceso es una característica valiosa.

La pantalla ASUS Lumina Pro OLED es otra de las joyas de la corona del equipo, aunque tratándose de ASUS, no es nada que nos sorprenda. Se trata de una pantalla OLED de 16’’ con resolución 4K y relación de aspecto 16:10, perfecta para productividad. Además, ASUS ha cuidado de manera muy especial la colorimetría, pensando en los usuarios que trabajan en campos como la autoría multimedia, la edición de vídeo y foto, el diseño gráfico o la programación de videojuegos, entre otros.
El brillo del panel es excepcional, con picos de 1600 nits en modo HDR. La tasa de refresco es de 120 Hz, con compatibilidad con el espacio de color DCI-P3 al 100% y una precisión de color con Delta E menor que 1. Nada más podemos pedir. El brillo medido en el laboratorio, además, es de nada menos que 660 nits. La validación Pantone y el tratamiento antirreflejos son otras de las virtudes de esta pantalla, prácticamente perfecta.
El teclado y el touchpad han sido tratados con esmero también. El recorrido de las teclas es de 1,7 mm, con un tacto preciso y cómodo. Y el touchpad, enorme, es compatible con la funcionalidad ASUS Dial, gracias a la cual el usuario puede interactuar con el equipo y las aplicaciones a través de un cómodo Dial que se activa en la parte superior izquierda del touchpad.
En pasadas generaciones de los equipos ProArt venía un Dial físico, aunque esta integración suponía aumentar el grosor y el peso. La decisión de habilitar el Dial táctil en el touchpad es acertada y equilibrada, con un buen equilibrio entre funcionalidad y condicionamiento del diseño industrial y la ergonomía del equipo.

En otros apartados como el audio, ASUS también ha echado toda la carne en el asador, con nada menos que 6 altavoces con Smart Amp y audio posicional a cargo de Dolby ATMOS. Más los 3 micrófonos integrados con tecnología de procesamiento mediante IA.
La conectividad contempla USB4, así como un interesante lector de tarjetas SD Express de alta velocidad. La conectividad Wi-Fi 7 y Bluetooth 5.4 completan el repertorio de tecnologías de conectividad.
Concretamente, yendo al detalle;
- 1x USB 4.0 Gen 3 Type-C support display / power delivery
- 1 x USB 3.2 de 2.ª generación tipo C compatible con pantallas/suministro de energía
- 2 x USB 3.2 de 2.ª generación tipo A
- 1x HDMI 2.1 FRL
- 1 x Conector de audio combinado de 3,5 mm
- 1 x Entrada de CC
- Lector de tarjeta SD Express 7.0
Más Wi-Fi 7 y BT 5.4


Si nos centramos en la batería, tenemos una capacidad de 90 Whr, que dan para unas seis horas y media de funcionamiento desenchufados de la corriente eléctrica. Lo cual no está mal para un equipo como este, con unos componentes tan cargados en cuanto a especificaciones y rendimientos.
El sistema de refrigeración, por su parte, viene con tres ventiladores y tecnologías avanzadas como el uso del metal líquido para maximizar la transferencia de calor entre los chips y los disipadores. El metal de la carcasa también contribuye a mejorar la disipación de calor en el equipo. Después veremos cómo se traducen estos aspectos en la experiencia de la vida real, tanto en rendimiento como en ruido y temperaturas.