Horizon Zero Dawn fue un título con buena acogida en PS4, un título que personalmente pude disfrutar y que añadía unas mecánicas interesantes con unos robots que se asemejan a animales que tienen partes estratégicas en el combate que podremos escanear e impactar de diferentes formas.
Sin ánimo de hacer spoilers puedo deciros que la trama también es interesante y da sentido a un mundo postapocalíptico donde la civilización moderna está arrasada y esta tecnología robótica contrasta con un armamento y unos atuendos más típicos de tiempos remotos.
En esta segunda entrega: Horizon Forbidden West continuamos la historia en un juego que lógicamente luce mejor, al ser de una generación posterior, creado para la PS5 y que una vez más tenemos la posibilidad de jugarlo en PC, con un despliegue importante en el soporte, especialmente con las tarjetas GFeForce RTX 40 Ada Lovelace.
Con NVIDIA tenemos el "triple pack" con el reescalado del DLSS, su tercera versión con generación de fotogramas y su tecnología de baja latencia Reflex. Si queréis informaros a fondo de la tecnología de esta generación Ada Lovelace podéis consultar nuestro artículo de la GeForce RTX 4090 en que cubrimos en profundidad sus características.