Modelo: Legion Pro 7 16IRX8H
Procesador: Intel Core i7-13700H
Gráfica: NVIDIA GeForce RTX 4080
Memoria: 32 GB (2 x 16 GB) LPDDR5 5.800 MHz
Pantalla: 16" WXQGA (2.560 x 1.600) IPS, 240 Hz
Almacenamiento: 1 TB NVMe 4.0 x4
Peso: 2,8 Kg para un grosor de 2,6 cm
Traemos a nuestro banco de pruebas un equipo perteneciente a la familia Legion de Lenovo. Estamos ante una gama de portátiles orientados al gaming, aunque siguiendo la tendencia actual de integrar los elementos estéticos gaming dentro de un diseño más bien neutro. Es decir, si configuramos una iluminación RGB que no priorice los cambios de color o los efectos dinámicos de iluminación, la estética del Lenovo Legion Pro 7 16IRX8H pasa a ser una estética sobria y apropiada para usos en cualquier escenario de productividad y ocio, ya sea en el ámbito doméstico o en el profesional o educativo.

Tenemos un equipo con un tamaño y peso ajustados, dentro de lo que es un equipo gaming de alto rendimiento: puede alojar hasta un Core i9-13980HX como CPU y una RTX 4090 laptop como GPU, aunque en esta configuración analizada, estamos un paso por detrás en CPU y GPU, como veremos en el apartado de la configuración interna. Con 2,8 Kg de peso, no es un portátil ligero, pero tampoco es un peso pesado de más de 3 Kg. El grosor está entre los 2,2 cm y los 2,6 cm. Realmente, son 2,6 cm, que es una cifra que muestra un buen trabajo de reducción de centímetros, pero sin sacrificar a la termodinámica. O, al menos, esa es la premisa que trataremos de dilucidar más adelante en las pruebas de rendimiento.

Estamos ante un equipo con una pantalla de 16’’ con relación de aspecto 16:10 y resolución de 2.560 x 1.600 píxeles, subiendo un punto la apuesta 2K tradicional de los formatos 16:9 con 2.560 x 1.440 píxeles de resolución. Es una diferencia pequeña, pero se agradece en escenarios de productividad y permite aprovechar más la pantalla, que además viene con marcos ultra delgados en tres aristas y algo menos delgado, pero muy bien trabajado, en la parte inferior de la pantalla.
La cámara está en el marco superior y está perfectamente integrada en el mismo, siendo compatible con el software Tobii Experience del que hablaremos en la parte del software, pero sirva como adelanto decir que permite usar la cámara como un trigger para configurar automatismos relacionados con nuestra presencia delante del ordenador o para usar nuestro rostro y la mirada como mecanismo de interacción con la interfaz del sistema, juegos o aplicaciones compatibles. Interesante.

Lenovo ha prestado una especial atención a los materiales empleados y al diseño industrial en general. De este modo, estamos ante un portátil que transpira robustez, literalmente por los cuatro costados y las dos superficies superior e inferior. La rigidez del chasis es extraordinaria e incluso sujetándolo por las esquinas no se aprecia alabeo alguno mientras la estructura sostiene los 2 kilos y pico que le corresponden.
La tapa superior también muestra un grado de solidez sobresaliente de cara a proteger la pantalla frente a presión. Así que, tendremos un grado adicional de seguridad y confianza cuando llevemos el portátil con nosotros en nuestros desplazamientos de ocio, trabajo o estudios.

Es un portátil “con maletero”. No es prominente, pero sí que tenemos una parte del equipo que sobresale más allá de los límites de las bisagras de la pantalla. Lenovo emplea este saliente (muy comedido en cuanto a tamaño) para integrar elementos de refrigeración y conectividad. Es una buena solución de compromiso que combina salidas de aire sobredimensionadas con una conectividad generosa en número y diversidad de puertos.
El teclado es de una calidad notable en cuanto a tacto y tamaño, con teclado numérico dedicado que es posible gracias al aprovechamiento de lado a lado que hace Lenovo del espacio. El touchpad no es tan generoso en dimensiones como en otros equipos, pero es suficientemente amplio como para manejarnos sin problema por aplicaciones y el sistema operativo. En juegos, eso sí, mejor usar un ratón o un mando de juegos. Es la recomendación habitual, pero no por ello deja de ser vigente.

Estamos ante un equipo con una configuración premium pero no extrema. Este modelo concreto, viene con procesador Intel Core i7-13700HX para el procesador, más una gráfica NVIDIA GeForce RTX 4080 Laptop con una pantalla de 16’’ con resolución nativa de 2.560 x 1.600 píxeles. El objetivo es acomodar en esta resolución de pantalla una experiencia gaming óptima, consistente en obtener tasas de frames por encima de 60 fps con ajustes de calidad gráfica altos o ultra.
La pantalla del portátil, por otro lado, se abre casi los 180 grados completos. Una muestra de buen hacer en la parte de diseño industrial e ingeniería por parte de Lenovo, aunque la ingeniería que más nos importa aquí es la termodinámica, y de ella nos ocuparemos más adelante.

Tenemos un botón de encendido dedicado, con un Led que indica con su color si estamos en modo rendimiento, silencioso, balanceado o personalizado. No tenemos teclas de acceso directo como tales, pero sí combinaciones de teclas “Fn + Tecla” que permiten realizar este tipo de ajuste con rapidez. Además, cuando pulsamos Fn, automáticamente se iluminan las teclas con las que podemos interactuar para cambiar el modo de rendimiento, ajustar la iluminación de la pantalla o del teclado, entre otros accesos rápidos.
Lo que no tenemos es lector de huella dactilar ni reconocimiento de rostro compatible con Windows Hello. No es que sea una carencia súper importante en un equipo gaming, pero sería deseable tener biometría para escenarios de uso híbridos de ocio y productividad.
Conexiones:
El repertorio de conexiones del Lenovo Legion Pro 7 16IRX8H es el siguiente:
Lateral derecho:
- Jack de audio combo de 3,5 mm
- Interruptor de encendido / apagado de la webcam
- 1 x USB-A 3.2 Gen1
Lateral izquierdo:
- 1 x USB-A 3.2 Gen1
- 1 x USB-C 4 Thunderbolt 4 (compatible con DisplayPort 1.4 y Power Delivery hasta 140W)
Parte trasera:
- Gigabit Ethernet RJ-45
- 1 x USB-C 3.2 Gen2 (compatible con DisplayPort 1.4 y Power Delivery hasta 140W)
- 1 x HDMI 2.1 hasta 8K a 60Hz
- 2 x USB-A 3.2 Gen1 (uno de ellos always on de 10W)
- Toma de alimentación
Inalámbricas:
En cuanto al transformador de 330W, Lenovo ha implementado la tecnología GaaN que permite reducir el tamaño de este componente, frente a modelos convencionales. Lo cierto es que se agradece que el transformador sea más delgado y ligero que en generaciones anteriores. Podremos cargar el equipo mediante adaptadores USB-C hasta 140W. Generalmente, los adaptadores que hay en el mercado están en torno a los 65W – 90W, al provenir en su mayoría de equipos delgados y ligeros. No podremos cargar el equipo de forma rápida, pero para salir de un apuro, nos vale.