AMD ha presentado recientemente sus procesadores AMD Ryzen 7000 para portátiles. Fue en el CES 2023, a principios de año. Estos procesadores y APUs para laptops, llegan algunos meses después de los AMD Ryzen 7000 para escritorio, y antes de los AMD Ryzen 7000 con memoria 3D V-Cache que acaban de “aterrizar” en el mercado de hardware.
Generalmente, se presta más atención a los procesadores de escritorio que a los procesadores para portátiles, ya sean de Intel o AMD. En parte, porque el rendimiento absoluto de las renovadas arquitecturas que Intel y AMD integran en sus nuevas generaciones de CPUs se expresa en todo su esplendor en los procesadores de sobremesa. Con todo, los procesadores para equipos portátiles, son bastante más interesantes de cara a perfilar el trabajo de ingeniería de los fabricantes.
Una de las razones por las cuales nos interesan más los procesadores portátiles, es la de tener que conjugar rendimiento con eficiencia en la vida real. La eficiencia importa, pero en un procesador de escritorio, las CPUs pueden emplear todos los Vatios que soporte la electrónica de potencia para trabajar sin más limitación que la capacidad del sistema de refrigeración para disipar la temperatura. Y esta limitación, en la práctica, está bastante por encima del punto de corte de los propios procesadores.

Foto: la refrigeración y el grosor de los portátiles juegan un papel decisivo en aspectos como el rendimiento máximo que podemos conseguir con una CPU y GPU determinadas.
Intel y AMD se aprovechan de este margen de maniobra para hacer que los TDPs de sus procesadores de escritorio hagan un uso bastante “arbitrario” de los límites de potencia. Por ejemplo, los Intel Raptor Lake de 13th Gen como el Core i9-13900KF, tiene un TDP de 125W, pero un MTP (Maximum Turbo Power) de nada menos que 253W.
En el caso de los procesadores de escritorio de AMD, tenemos para el AMD Ryzen 9 7950X, un TDP de 170W, con un PPT (Package Power Tracking) de 230W. Como podemos ver, Intel y AMD “estiran” los límites de Vatios en los procesadores de escritorio hasta límites considerables. En el caso de Intel, esta interpretación libre de los Vatios es más evidente, mientras que AMD mantiene las diferencias entre el TDP y el PPT dentro de márgenes menos generosos que Intel, que duplica el TDP con el MTP.
Procesadores portátiles: cuando los Vatios están limitados por el grosor y el peso
En los procesadores portátiles, a diferencia de los procesadores para escritorio, el límite máximo para los Vatios que puede usar un procesador viene “impuesto” por el diseño de los laptops. Si estamos ante un equipo con un peso de 1 Kg o menos, con un grosor de entre 1 y 1,5 cm, por poner un ejemplo, como es el caso de equipos como el ASUS Zenbook S 13 OLED, puede gestionar picos de Vatios de entre 40W y 50W, con un régimen sostenido de disipación de 30W aproximadamente.

Foto: El rendimiento de un procesador portátil está relacionado directamente con los Vatios sostenidos y de pico que puede mantener en funcionamiento. A más vatios sostenidos, más rendimiento. En un portátil, los vatios suelen estar limitados, no por el procesador, sino por aspectos de diseño como el grosor, la entidad del disipador o el número y tamaño de ventiladores.
Con ese “presupuesto” de Vatios, fabricantes como Intel, AMD, Qualcomm o Apple, tienen que elegir una arquitectura que sea capaz de aprovechar al máximo los Vatios disponibles. Recuerda que en los equipos de escritorio, el límite máximo de Vatios lo marca el propio procesador a través del valor MTP (Intel) o PPT (AMD).
En Noticias3D ya hemos abordado este tema desde una perspectiva eminentemente práctica en artículos como este, donde veíamos cómo a medida que se dispone de menos Vatios, los rendimientos de los procesadores portátiles de Intel y AMD varían de forma significativa. En aquel momento, veíamos que AMD era más eficiente que Intel, especialmente en rangos de Vatios por debajo de 50W, con un comportamiento óptimo en el rango de 15W a 35W, comparado con Intel. Trabajábamos con procesadores AMD Ryzen 7 6800H e Intel Core i9-12900H.
Si bien tendremos que actualizar esos datos con los procesadores Ryzen 7000 e Intel Core de 13th Gen, podemos anticipar que AMD seguirá estando por delante en esos rangos de Vatios.
Como solemos decir para ilustrar la ventaja de AMD frente a Intel en eficiencia, el hecho de que la inmensa mayoría de consolas gaming portátiles x86 venga con procesadores AMD Ryzen “U”, en vez de procesadores Intel Core “P” o “U”, confirma que AMD rinde más que Intel en escenarios donde los Vatios están limitados por tamaño, peso y autonomía.

Foto: la mayoría de las consolas portátiles x86 emplean procesadores AMD Ryzen U. El motivo estaría en la mejor eficiencia de estos procesadores Ryzen frente a sus equivalentes portátiles de Intel de las series U y P.
Familias de procesadores portátiles: a más grosor y peso para el laptop, procesadores con más Vatios
Si el TDP para los procesadores de escritorio cae básicamente dentro de dos categorías, la de los procesadores enfocados a rendimiento, con TDPs por encima de 100W y la de los procesadores enfocados a eficiencia, con TDPs en torno a los 65W, para portátiles tenemos tantas categorías como tipos de portátiles encontremos en el mercado.
Básicamente, en lo más alto de la clasificación, tenemos los procesadores para portátiles con grosor y peso elevados. Son portátiles más cercanos a equipos MiniPC de escritorio con pantalla integrada que a los laptops propiamente dicho. De hecho, para estos equipos de más de 2 cm de grosor y más de 3 Kg de peso, con pantalla de 17’’, como el MSI Titan GT77 , se usan procesadores de escritorio adaptados al zócalo de los equipos portátiles, tuneados ligeramente para funcionar en este tipo de laptops.
Intel tiene los procesadores de la familia HX con un TDP de 55W que puede superar los 150W si la refrigeración lo permite, mientras que AMD también tiene procesadores HX, donde el TDP que se maneja es de 55W+, con un máximo de 120W. De nuevo, se trata de procesadores de escritorio adaptados a portátiles donde el tamaño y el peso no son un problema.

Foto: los fabricantes segmentan las gamas de procesadores portátiles de acuerdo con el TDP que manejan, dependiendo del tipo de portátil donde se usarán, ya sean ultra ligeros, delgados y ligeros, para creadores o gaming.
Son procesadores sin gráficos integrados o con iGPUs muy flojas y limitadas, para equipos gaming con GPUs dedicadas de gama alta.
Después entramos ya en los procesadores puramente para portátiles, pero de alto rendimiento. Los TDPs que se manejan están entre los 35W y los 45W. Es el caso de los procesadores de la familia H de Intel o los HS de AMD en los Ryzen 7000. Son procesadores que ya vienen con gráficos integrados, así como aceleración para IA en algunos modelos, para portátiles con diseños menos contundentes que en el caso anterior, pero preparados para gaming o para Creadores, con gráficas dedicadas en muchos casos.
Seguimos con los procesadores para portátiles delgados y ligeros “normalitos” entre 15W y 28W, con gráficos mayoritariamente integrados y un buen equilibrio entre rendimiento, peso y tamaño. Son los procesadores AMD Ryzen de las familias HS y U. Intel tiene en la gama “P” sus procesadores para este tipo de equipos.
Después están los equipos delgados y ligeros y los ultraligeros, con procesadores U, con el TDP “tirando” a los 15W más que a los 28W. AMD tiene a los procesadores U como los óptimos para este tipo de laptops “thing and light”, mientras que Intel tiene también a los procesadores de clase U para ellos.
Por último, tenemos equipos portátiles especialmente finos o ligeros, o que no llevan refrigeración activa. En este caso, AMD ofrece los procesadores Ryzen “e” de 9W. Como “propina”, AMD diferencia los procesadores para Chromebooks de los destinados a equipos Windows. Serían los AMD Ryzen de la clase C, con entre 15W y 28W de TDP.
La polémica: diferentes arquitecturas para diferentes gamas de procesadores
Tras el anuncio de los procesadores AMD Ryzen 7000 Mobile, se ha hablado mucho sobre la decisión de utilizar diferentes arquitecturas Zen para diferentes familias de procesadores portátiles.
Concretamente, AMD usa arquitecturas Zen2, Zen3, Zen3+ y Zen4. Realmente no es una práctica que no haya sido usada antes por Intel incluso. En los procesadores Intel Core de 13th Gen, sin ir más lejos, para los modelos no-K Core i5, como el Core i5-13400, se usan cores Alder Lake en vez de Raptor Lake.
En la siguiente sección veremos con detalle los diferentes modelos y arquitecturas de los diferentes procesadores, en busca del propósito de AMD a la hora de introducir esta aparente confusión.