Este mismo mes hemos visto la llegada a escritorio de los nuevos Ryzen 5000, basados en el núcleo Zen 3, y que por el momento nos han dejado con los procesadores para gaming más potentes que hay actualmente. Pero los Ryzen 9 5950X y 5900X no llegaron solos: se anunciaron dos CPUs más, si bien en el día del estreno nos centramos, sobre todo, en lo que teníamos en mano, las dos CPUs mencionada. Pues bien: hoy nos han llegado tanto el Ryzen 7 5800X como el Ryzen 5 5600X, dos opciones englobadas dentro de, respectivamente, la gama media-alta y la gama media y que pueden suponer un nuevo empuje para AMD, ya que estos sectores suelen ser los que más ventas les generan. Dos buenos procesadores como estos pueden suponer otro bofetón a Intel que, eso sí, intenta luchar como puede contra una AMD engrandecida y reforzada por un producto potente y competitivo en precio. Veremos cómo se comportan estos dos procesadores, que hacen crecer la familia Ryzen 5000.

Los dos procesadores que hemos recibido se engloban, como hemos dicho, dentro de la gama media y media-alta, por lo que el envase ya cambia: son como los Ryzen que conocemos, con una caja más grande, y no sólo viene el procesador, sino que les acompañan los Wraith Cooler, los ventiladores por defecto de AMD, y que suelen ser más que suficiente para mantener a ralla las temperaturas de estas CPUs sin hacer gasto en soluciones externas. Se entiende que en modelos superiores, los usuarios escogerán sistemas de disipación adicionales, como pueden ser soluciones por aire o por agua, de manera que la mayoría de veces no se incluyen disipadores de serie. En este caso se agradece, porque es colocar sobre el arnés de la placa base habitual y punto. Naturalmente, nuestra placa base requerirá de una actualización de BIOS porque, como ya sabréis a estas alturas, los chipsets siguen siendo los mismos que los de la generación anterior.

Quizá ya os suenen, pero repasemos rápidamente las características de las dos CPUs que analizaremos en el día de hoy:
- Ryzen 7 5800X: 3,8 GHz (4,7 GHz boost), 8/16 núcleos, 4+32 MB caché (L2+L3), TDP de 105 W, 449 $
- Ryzen 5 5600X: 3,7 GHz (4,6 GHz boost), 6/12 núcleos, 3+32 MB caché (L2+L3), TDP de 65 W, 229 $
Son, pues, TDPs distintos, una caché parecida y un recuento de núcleos diferentes, lo que sin duda define la gama en la que se engloba cada CPU. Estos movimientos por parte de AMD están haciendo que el estándar de núcleos se fije en los 6/12, lo que supone todo un reto para los programadores, sobre todo de juegos, que deben adaptarse para aprovechar todo ese recuento de núcleos para sacar el máximo partido a sus creaciones.

Con todo, el catálogo de AMD aumenta, y sus productos son cada ve más afinados, y eso es algo que los medios hemos podido comprobar in-situ. Con esta nueva tanda de productos en las gamas más populares, AMD se asegura estar en los sectores más estratégicos del segmento de escritorio, muy querido para la compañía, tanto que la gama 5000 ha comenzado por él y no por los, ahora, famosos portátiles (como sí lo hizo la gama 4000). En cualquier caso, puestas las fichas sobre la mesa, esperamos un rendimiento escalado respecto a lo que ya conocemos, y eso es justo lo que hoy vamos a comprobar.
