Estamos a punto de ver llegar las consolas de nueva generación PlayStation 5 y Xbox Series X/S. Además, el segmento gaming en el mundo de los portátiles y los equipos de sobremesa está en pleno auge también, especialmente con la llegada de las tarjetas gráficas de nueva generación de NVIDIA y AMD. La generación Ampere y Big Navi de NVIDIA y AMD permiten jugar con resoluciones 4K a 60 fps y la calidad gráfica configurada al máximo con efectos de raytracing en tiempo real.
Son GPUs pensadas para una audiencia entusiasta de gamers que buscan una experiencia de juego tan perfecta como sea posible, y dispuestos a invertir una suma de dinero muy elevada para ello. Paralelamente al desarrollo de las tarjetas gráficas “tradicionales”, NVIDIA lleva años desarrollando una plataforma cloud para gaming en la que los juegos se ejecutan en la nube y se juegan en los equipos de los usuarios, usando como tecnología de conectividad Internet.
GeForce Now surge en fase beta en 2015, y pasa a ser un servicio comercial en febrero de este mismo año. El antecedente fue NVIDIA Grid, que era el nombre clave de GeForce Now. Hasta 2019, era NVIDIA la que instalaba los juegos en sus servidores, ofreciéndolos a los usuarios sobre un número limitado de plataformas, como NVIDIA Shield, o de geografías.

Este tipo de servicios cloud precisan de una infraestructura de servidores muy ambiciosa, por lo que su despliegue tiene lugar de un modo progresivo y gradual, llegando a audiencias paulatinamente más numerosas a medida que aumenta la capacidad de procesamiento en la nube.
NVIDIA GameStream, un GeForce Now “de andar por casa”
Entre medias, posiblemente como un derivado de la investigación de NVIDIA en el campo de la emisión de vídeo en streaming y la sincronización de las interacciones en el teclado y ratón o gamepad con los servidores remotos, NVIDIA desarrolla GameStream que permite tener el juego instalado en el ordenador de sobremesa con una GPU NVIDIA compatible y jugarlo en la consola NVIDIA Shield usando la red WiFi para ello.
La diferencia (una de ellas) entre GameStream y GeForce Now es que en el caso de GeForce Now los juegos se instalan y ejecutan en un servidor gestionado por NVIDIA o por los centros de datos donde se alojen las máquinas propiamente dichas. No estamos ante equipos convencionales: se emplean servidores con procesadores para centros de datos, así como GPUs de muy alto rendimiento virtualizadas y almacenamiento de muy alta velocidad.
GeForce Now: ¿qué lo hace especial?
La clave que diferencia a GeForce Now de otros servicios como Google Stadia o Xbox GamePass Ultimate, es que NVIDIA lo que comercializa básicamente, es el ordenador donde instalaremos nuestros juegos que hayamos comprado en marketplaces como Steam, Uplay o Epic Games. Es decir, cuando accedemos a GeForce Now, entramos en un “front-end” en el que tendremos acceso a un buen número de juegos gratuitos más una extensa colección de juegos comerciales. Los juegos gratuitos están disponibles tanto en la versión “Fundadores” de pago y la gratuita. Sí, hay una modalidad gratuita que nos permite usar los servidores de NVIDIA y jugar con aquellos juegos “permitidos” en GeForce Now que ya tengamos. La diferencia entre la versión de pago y gratuita está en varios frentes.

Por un lado, en la versión gratuita tenemos que esperar a que haya un hueco para entrar en el servidor. Hace unos meses era bastante fácil pillar slot en la modalidad “free”, pero ahora hay que esperar bastantes minutos para conseguir acceder al servicio. Además, en la versión gratuita solo podemos estar jugando durante una hora antes de que tengamos que volver a esperar turno.
En un tercer nivel tenemos que en la versión free no contamos con efectos RTX. La resolución máxima que podemos configurar en este servicio es de 1.920 x 1080 píxeles a 60 fps. Si queremos una tasa de frames mayor, podremos obtenerla reduciendo la resolución hasta 1.280 x 720 píxeles.
GeForce Now: el equivalente de un equipo gaming laptop de 2.500 euros
Cuando nos damos de alta en el servicio GeForce Now, en la práctica estamos pagando por el uso de un equipo gaming laptop con un precio de mercado de 2.500 euros o más, si hacemos un cálculo que relacione prestaciones con características técnicas. Un uso que podemos hacer tanto desde un PC como un Mac, un Chromebook, un dispositivo NVIDIA Shield o un Smartphone o tableta Android.

Es como si le pidiéramos el equipo gaming de gama alta a un amigo y nos lo dejara para jugar exclusivamente. Hay un matiz en esta afirmación que explicaremos luego en la parte más técnica, pero la filosofía es esa a vista de pájaro. Así de simple, en principio. Ahora, toca ir a los detalles.
No podemos instalar las aplicaciones que queramos, aunque teóricamente nada podría impedir que NVIDIA ofreciera la posibilidad de usar otras aplicaciones como Adobe Premiere, aplicaciones CAD, o aplicaciones de edición y autoría multimedia siempre y cuando llegase a acuerdos con empresas como Adobe, por ejemplo.
De momento, GeForce Now se ciñe a juegos, y únicamente a algunos. Títulos como Call Of Duty Black Ops Cold War, recién salidos del horno, no están, así como otros de estudios como iDSoftware o Bethesda. Pero hay una selección de títulos compatibles que satisfará a muchos usuarios y permitirá disfrutar de una experiencia de juego Premium sin tener que invertir en un equipo gaming.
Es importante destacar que los entusiastas de los videojuegos, con aspiraciones del tipo 4K y tasas de refresco de 120 Hz o 240 Hz no encontrarán en GeForce Now la respuesta, aunque sí puede que encuentren un complemento para esa experiencia lúdica, que podrán llevar incluso en un Android o un dispositivo iOS ahora que parece que llegará a Apple a través de una web app.