Fabricante: Lenovo
Modelo: Explorer
Pantalla: LCD 2.880 x 1.440
Ángulo de visión: (FOV): 105 grados
Conexiones: USB, HDMI, jack de auriculares
Compatibilidad: Microsoft Windows 10 con Fall Creators Update
Controles: Incluidos
La Realidad Virtual no es nueva en el mundo de la tecnología. Oculus con sus Rift y HTC con las Vive han sido los abanderados de esta tecnología que, literalmente, pone ante nuestros ojos un mundo paralelo de experiencias didácticas, lúdicas o multimedia. Microsoft optó por la Realidad Aumentada con sus HoloLens, yendo en una dirección ligeramente diferente, aunque la tendencia actual es la de buscar un cierto punto de convergencia y convivencia entre estas dos "realidades".
En el mundo de las consolas, Sony con sus PlayStation VR se atrevió a integrar la realidad virtual en una consola, aunque con ciertas limitaciones. Por su parte, en el mundo de los dispositivos móviles, compañías como Samsung con sus gafas Gear VR y la alianza con Oculus para implementar la parte de software y aplicaciones, y Google con su propia tecnología VR, ahora llamada DayDream, han aprovechado las tecnologías móviles para llevar la Realidad Virtual a su terreno.

Los smartphones tienen pantallas que son adecuadas por tamaño para usar como pantallas de VR, al tiempo que cuentan con la tecnología de CPU, GPU, comunicaciones y sensores necesaria para ejecutar apps VR de forma autónoma. Las gafas de VR cuentan con una pantalla dividida de modo que en cada mitad se muestra un frame de la acción correspondiente a lo que ve cada ojo. Además, entre el ojo y la pantalla hay una óptica a modo de lupa que hace que el ojo solo vea la parte que le corresponde de la pantalla. La secuencia de frames derecho e izquierdo hacen que se perciban las tres dimensiones de un modo convincente sin más que ajustar la distancia entre la pantalla y los ojos o la separación entre los frames derecho e izquierdos.
Además, podemos encontrar dos tipos de gafas VR: las que tienen pantalla propia integrada y las que usan un smartphone como pantalla. Dentro de las que tienen pantalla integrada, están las que funcionan de modo autónomo y aquellas que son solo una pantalla, recibiendo los frames de un ordenador o una consola. Tanto Oculus como HTC están evolucionado sus modelos de gafas de realidad virtual. Vive Pro acaba de ser presentado y Oculus está a punto de sacar el modelo Go que no tiene necesidad de ordenador alguno para funcionar. Lenovo y Google trabajan con unas gafas para Daydream independientes, las Lenovo Mirage Solo.

Microsoft, por su parte, ha ido integrando su propia tecnología VR en Windows 10 en forma de su Mixed Reality, disponible en la actualización Fall Creators Update. Al mismo tiempo, se han definido especificaciones para integrar los sensores de posición y movimiento en las propias gafas, eliminando los dispositivos de señalización externos de HTC y Oculus, por ejemplo.
El resultado, es una mezcla entre las soluciones de HTC y Oculus, con tecnología dependiente del ordenador para los gráficos, y posicionamiento y sensores heredados de Oculus. Fabricantes como Lenovo, Dell, HP, Acer o Samsung han desarrollado ya sus propios HMD compatibles con Windows Mixed Reality, y en esta ocasión hemos podido tomar contacto con las Lenovo Explorer.
Las Lenovo Explorer usan tecnología de pantalla LCD en vez de la habitual AMOLED de las Vive de HTC, por ejemplo. Es una decisión acertada en tanto en cuanto las pantallas AMOLED usan una matriz Pentile que no se comporta bien en las gafas VR. Las triadas RGB no son tales en las pantallas AMOLED, alternando píxeles RG y BG, por lo que se hace muy evidente el baile de subpíxeles cuando se usa con un sistema de ampliación como el de las gafas de realidad virtual.

Son gafas ergonómicas y es posible jugar bastante tiempo sin que fatiguen, y además es posible levantar el grupo óptico para ver la "realidad" en un momento dado sin tener que quitar todo el casco VR. Los cables HDMI y USB están bien enrutados y se convierten en un mal menor hasta que llegue una versión inalámbrica en algún momento futuro. Eso sí, los auriculares los tendrás que poner tú, o usar el audio del ordenador, a costa de que la experiencia sea menos inmersiva.
El ajuste se realiza mediante un sistema parecido al de las Hololens, muy fácil de personalizar y robusto, Los mandos incluidos usan un sistema de LEDs para el tracking, que funciona muy bien todo sea dicho y responde sin penalización de la latencia. Son mandos de gran calidad y con todos los controles y ajustes necesarios para controlar la interfaz en juegos y aplicaciones.

Es curioso que la alerta de batería baja se activó a las pocas horas, pero con todo, seguían funcionando y siguen funcionando a pesar de que ya hace mucho que el sistema avisa de que las pilas (dos AA por cada mando) están agotándose. La recomendación es la de usar pilas recargables de al menos 1.900 mAh.
El cable de conexión con el ordenador es largo y no es fácil que se enrolle, en la experiencia sentada, sin definir un áreas de juego, no molesta apenas. Pero, como decíamos antes, es de esperar que en el futuro haya una versión inalámbrica.