Fabricante: MSI
Modelo: X99A GAMING PRO Carbon
Procesadores: Intel con socket LGA 2011v3
Chipset: X99
Memoria: DDR4
Puede que a estas alturas una X99 no tenga mucho sentido, ya que lo hemos dicho todo acerca de esta plataforma, pero nada más lejos del a realidad... Y es que cuando Intel sacó Skylake, los fabricantes comenzaron a renovar sus placas X99 incluyendo las tecnologías implementadas con las Z170, como podían ser, por ejemplo, conectores SATA Express, U.2 o M.2, de manera que los que tuvieran procesadores LGA 2011 pudieran gozar de todo lo nuevo. Ya vimos algunos ejemplos de aquella nueva estrategia de los fabricantes, y hoy nos llega una más. MSI nos ha cedido esta X99A GAMING PRO Carbon para incluirla en nuestra ya vetusta plataforma de pruebas, y renovar así el parque que utilizamos habitualmente para el análisis de placas (la referencia comparativa) y GPUs. Hemos querido hacer un análisis de esta X99A GAMING PRO Carbon algo más breve de lo normal, porque muchas de las cosas que trae ya las conocemos, y sí, realmente poco se puede decir ya a estas alturas de la X99 que no sepamos ya.

La gama Carbon de MSI presenta una estética mucho más sobria que el resto de sus placas gaming, como seguramente sabréis, optando por el color gris con apariencia de fibra de carbono (en realidad, los disipadores pasivos llevan una capa superior de polímero de fibra de carbono, el que se utiliza en coches de carreras, para una mejor transmisión del calor). Dichos acabados se extienden a los disipadores que hay sobre el chipset principal y las fases de alimentación, dotando el conjunto de un casi permanente color gris/negro. MSI también ha optado por dotar esta X99 con Steel Armor, el recubrimiento metálico que vemos en los puertos PCI Express de juegos y en los slots de RAM.
Respecto a dicha RAM, la placa acepta hasta 128 GB DDR4 a 3.466 MHz, que es más de lo que aceptaban los primeros modelos de X99, además de aceptar módulos con perfiles XMP. Dispone de 4 slots PCI Express x16 habilitados para juegos, y en este caso, en contraposición con las Z170 y Z270, no hay casi limitaciones por las pistas PCIe, ya que contaremos con la velocidad máxima x16 con configuraciones duales, y hasta combinaciones de x16, x16, x8 y x8 si optamos por hasta 4 GPUs. Naturalmente, acepta tanto tarjetas AMD como NVIDIA en sus configuraciones multi GPU. También disponemos de dos puertos PCIe x1.


Arriba y abajo
El almacenamiento tampoco se queda atrás: 10 puertos SATA 6 Gbps, 1 puerto M.2, 1 puerto U.2 (soporte NVMe), además de los USB internos y externos (que cogen pistas tanto del chipset X99 como de chips dedicados ASMedia ASM1142 y VIA VL805). El audio lo domina el chip Realtek ALC1150 que MSI dota de Audio Boost 3, y la LAN por Intel I218-V. En la hoja de especificaciones podréis ver todos los conectores que trae, que son numerosos, así como los distintos pins y conectores internos. Respecto a esto, en la parte trasera vemos caras conocidas de tecnologías modernas, ahora ya orientadas a X99: 10 puertos USB (4 USB 2.0, 4 USB 3.1 Gen.1, 1 USB 3.1 Gen.2 y 1 USB 3.1 Gen.2 tipo C), un PS/2, 1 botón Clear CMOS, 1 ethernet, 5 jacks de audio y una salida S/PDIF óptica.

Y las conexiones traseras
Respecto a las tecnologías impostadas por MSI, no nos extenderemos mucho porque básicamente trae una buena parte de lo que hemos ido observando en placas del fabricante últimamente: Mystic Light (con Mystic Light Extension), DDR4 Boost, Audio Boost 3 (con software Nahimic), Game Boost, BIOS UEFI completísima, Steel Armor, certificado SteelSeries, componentes Military Class, acompañamiento de software Dragon Eye... Como vemos, completa hasta las cejas. Y potente, eso seguro.
Placa base: MSI X99A GAMING PRO Carbon.