Fabricante: MSI
Modelo: Z270 SLI PLUS
Procesadores: Intel con socket LGA 1151
Chipset: Z270
Memoria: DDR4
Las placas Z270 ya están aquí para sacar el máximo partido de los nuevos procesadores Intel de séptima generación con nombre clave Kaby Lake. Todos los fabricantes están renovando sus gamas de productos para acomodar los nuevos modelos en sus referencias, y MSI no es una excepción. En este caso, la placa que ha llegado a nuestro banco de pruebas pertenece a la gama Pro, para usuarios que no tengan en el gaming su mayor vocación pero no quieran prescindir de una tecnología puntera, y con los avances más recientes en cuanto a conectividad y calidad de fabricación y los componentes empleados en la construcción de la placa.
En esta gama tenemos también el modelo SLI (sin PLUS), con un repertorio de características más modestas pero compartiendo la misma filosofía y audiencia. Las diferencias estriban en los disipadores, así como en funcionalidades tales como VR Ready o la posibilidad de usar LEDs conectados directamente a la placa para personalizar la estética del equipo. Así pues, la MSI SLI PLUS es una buena propuesta sobre el papel, como solución de compromiso entre una placa no enfocada al gaming y una de propósito general, con características que se adentran en el campo de los videojuegos y su estética, pero sin que ello suponga tener que desembolsar una cantidad de dinero elevada para acceder a ellas.

Y así es la MSI Z270 SLI PLUS
La placa cuenta con un buen número de opciones de conectividad, tanto en la parte trasera como en la propia placa. Además, la disposición de los componentes está bien trabajada y con elementos de valor añadido propios de estas gamas avanzadas de placas, como el refuerzo de las ranuras PCI-Express, por ejemplo. Los disipadores están bien dimensionados, aunque sin llegar al extremo de los modelos gaming. La SLI (no PLUS), tiene unos disipadores más discretos, y son uno de los argumentos que hacen que esté posicionada un punto por detrás de la SLI PLUS.

Material adjunto
Los accesorios que acompañan a la placa se reducen al mínimo en este modelo, aunque no es sorprendente teniendo en cuenta que estamos ante una placa para usuarios con un nivel de exigencia menor que los entusiastas que centran su atención en modelos con un repertorio de extras y acabados más ambiciosos. Con todo, no es una placa que en principio vaya a hacer que nos quedemos cortos a la hora de montar o actualizar nuestro equipo de sobremesa. El panel trasero cuenta con una disposición de las conexiones estándar, donde no hay demasiadas florituras, pero sí las conexiones esenciales para manejarnos de un modo óptimo. USB 3.1 con el conector reversible USB Tipoi C, así como DVI y HDMI, aunque sin la conexión óptica para el audio como encontramos en modelos de gamas más altas.

Y todas las conexiones traseras de la placa
Placa base: Placa base MSI Z270 SLI PLUS.