
El interior de la Masterbox NR200P es más rectangular que cuadrado, brindando la posibilidad a los que se monten una máquina de instalar GPUs grandes, como se ha dicho. Pero no es lo único: resulta que nos adjuntan un riser para que podamos poner la tarjeta gráfica en vertical, y así convertirla en el centro de todas las atenciones. Si hacemos eso, no podremos poner algunas de las configuraciones de ventiladores (como el trasero) o de kits de refrigeración líquida, así que deberemos jugar con el espacio del que dispongamos. Es toda una ventaja y, desde luego, todo un acierto por parte de Cooler Master.

Disponemos de poco espacio, de manera que los cables deberemos introducirlos y ordenarlos nosotros. Fijaos que la fuente de alimentación que podemos instalar aquí es de formato SFX, por lo que es algo a tener en cuenta. Sin embargo, si tenemos impresora 3D podemos imprimir un bracket para instalar fuentes ATX que, al igual que las patas antes citadas, los modelos pueden descargarse de la web del fabricante. Pensad que si hacemos esto, algunas cosas no nos cabrán, como por ejemplo algunas soluciones de disipación en la parte frontal, de manera que estaría bien que viésemos antes las características de nuestro material antes de nada.

A pesar de que andemos justos de espacio (no es culpa de nadie: si queremos cajas para mini ITX es lo que hay), como se ha dicho antes, la Masterbox NR200P albergará tarjetas gráficas grandes: sin ir más lejos, las nuevas RTX 3000 se pueden poner (posee 3 brackets), y soluciones de hasta 330 mm. En cuanto al disipador de la CPU, podemos instalar una unidad de hasta 153 mm. de altura (76 mm. si utilizamos el riser para la GPU).