Vista la cara externa de este MSI Trident X Plus 9SD, toca ver qué nos depara el interior. Como hemos visto, al menos una tapa lateral se puede retirar, tanto para sustituirla por la de vidrio templado, como para poder acceder al interior y, como se dijo, poder actualizar algunos componentes. Fijaos que la tarjeta gráfica ha sido colocada verticalmente, de manera que pueda "lucirse" más, y sea posible ver el colorido RGB de la misma desde el exterior; su colocación obedece también a una protección de los componentes, ya que están colocados de manera que no sufran si hay un transporte por en medio. Sorprende ver que en un espacio tan estrecho los muchachos de MSI hayan logrado colocar todos sus componentes sin problema alguno, y encima garantizando ventilación y ruido óptimos.

Y es que en el interior encontramos toda una serie de componentes que nos son conocidos. El procesador es un Core i7 9700K, con lo que se mantiene respecto al último Trident que analizamos. En este caso, el procesador viene acompañado de 16 GB de RAM DDR4 a 2.666 MHz, y el punto que más nos interesa: la tarjeta gráfica dedicada. Aquí contamos con una NVIDIA RTX 2070 Super, con lo que éste es el verdadero cambio de esta serie Trident, a saber, la introducción de los modelos renovados Super de NVIDIA. El resto componentes son también de interés: unidad principal SSD NVMe, unidad secundaria como disco duro mecánico de alta capacidad, sonido envolvente de alta calidad 7.1 (con la presencia de Nahimic 3), o la presencia de Wi-Fi 6.

No podemos olvidar que el MSI Trident X Plus 9SD es un producto ya montado, lo que significa que ya cuenta con todos los componentes, fuente de alimentación incluida. Los de MSI han decidido instalar una unidad FSP de 650 W, más que suficiente para el hardware que montamos. Un disipador para CPU de perfil bajo, y una correctísima unión de todos los cables, rubrican un producto fantástico que siempre ha dado muy buenos resultados, y que pasamos a someter a pruebas acto seguido.
