Cuantas más opciones, mejor. MSI nos ofrece la posibilidad de llevar el juego al salón gracias al Trident, un PC con cuerpo de consola que pega muy bien en cualquier ambiente, y que tiene un elegante diseño. Su tamaño y su apariencia va a permitir que lo usemos para jugar, sí, pero también para multimedia y para otras tareas, ya que lleva en su interior una serie de piezas de hardware muy acorde al rendimiento que se espera de él. El Trident puede ser colocado en horizontal o en vertical, ya que se adjunta un pie para dejarlo en esta posición, con lo que podemos elegir según el escenario que tengamos.
¿Por qué lo de Trident? Según MSI, porque tiene las 3 puntas de la lanza: compacto y ligero, el PC preparado para VR más pequeño, y diseño que garantiza silencio y buena temperatura.

El Trident de MSI
Y es que con unas medidas de 346,2 x 71,8 x 232,4 mm. y un peso neto aproximado de 3 kilos, el Trident es realmente una máquina compacta. MSI lo ha dotado de un diseño llamativo, semejante al de una PS4 (por poner un ejemplo), dejando en la parte frontal ciertas conexiones, y el resto en la trasera, y moteando la estructura de salidas de aire diversas para que los componentes internos queden bien refrigerados. Sobre esto, el Trident dispone del Silent Storm Cooling 2, un sistema eficiente que permite una refrigeración óptima tanto de pie (entra el aire por el lasteral superior y sale por la parte trasera, donde las conexiones) como horizontalmente (entra aire por la ranura más grande y se expulsa por detrás y por el lateral). De esta forma, las diferentes cámaras internas reciben aire mientras el ventilador principal de la CPU, diseñado por MSI, ayuda en este menester.
Como antes comentábamos, el Trident se puede poner en vertical y en horizontal, y no es la única personalización: en una de las esquinas tenemos una banda de leds cuyos efectos pueden personalizarse por software, lográndose curiosos efectos. Respecto a las conexiones no anda corto precisamente. En la parte delantera, junto al led de actividad de disco, tenemos: una entrada y una salida de audio, un puerto USB 3.1 tipo C, 2 puertos USB 3.1 tipo A, y un HDMI (ideal para cascos de VR). En la parte trasera sigue la fiesta: dos HDMI (uno especialmente dedicado a VR), el puerto de alimentación para el transformador externo, 4 puertos USB 2.0, otro USB 3.1 tipo A, y un puerto gigabit ethernet. El botón de encendido está en el lateral donde hallamos la banda de leds.




Las diversas conexiones
Habiendo recibido el primer sample del Trident en exclusiva, pasaremos a ver qué hay en su interior y luego a probarlo. Esta vez no disponemos de ningún casco de VR, pero sí que podemos someter al Trident a alguna prueba al respecto para salir de dudas acerca de su viabilidad para VR...